martes, 29 de noviembre de 2011

Ansío viajar...


Ansío viajar. Hace poco descubrí lo maravilloso de enfrentarse al camino, aunque no podría realmente poner en palabras qué fue lo que me generó tal emoción.

Quizás sea lo desconocido. Pero no ese desconocido común, extraño que genera temor. Sino un desconocido atractivo, latente… un desconocido ávido de ser descubierto.

Hay viajes y viajes. Uno decide a dónde ir según lo que tenga ganas de encontrar. A veces se quiere ver todo y muchas más se pretende ver nada.

Muchas veces salimos de una rutina para entrar en otra. Ir a la costa todas las segundas quincenas de todos los eneros de la vida puede volverse rutinario.
Otras veces huimos despiadadamente de nuestra vida y nos lanzamos hacia algo completamente inesperado y diferente.

Ese viaje es el que estoy buscando. Ese viaje que te posiciona en un lugar alterno, que te obliga a cambiar el paradigma de tus días, a usar la cabeza y los sentidos para poder llegar a tu meta y volver habiendo realmente CONOCIDO.

Tanto paisaje hermoso nos rodea y no lo vemos. Tanta gente interesante y diferente nos pasa por al lado y no conocemos. Tanto podemos aprender de eso y no lo aprovechamos. Cuánta realidad ajena a la nuestra está ahí afuera y no podemos comprenderla porque simplemente la ignoramos.

A veces el camino a enfrentar no está lejos. Ese camino aparece día a día bajo nuestros pies. Todos los días partimos hacia el camino… Con el avión a Perú, con el tren a Tucumán, con el bondi a la estación de Once, siempre emprendemos un viaje digno de ser recorrido. 

1 comentario:

Darkseid dijo...

Me gustó mucho esta entrada de tu blog. Comparto esa pasión por viajar a lugares desconocidos, escapando de lo establecido..mi ultimo viaje fue así por el sur de nuestro país, sin planificar, conociendo gente, viviendolo, disfrutándolo. Muy distinto a cualquiera de los viajes que habia realizado anteriormente, simplemente me dejé llevar por la ruta y por la gente de los lugares...