Lo que no se debe hacer

Hace ya un par de semanas vengo insistiendole a mi vieja para que vaya al médico. Como buena cabeza dura que es, me ignoraba completamente.
Tuve que desplegar una escena digna de un culebrón mexicano para que me prometa solemnemente que iba a hacerse ver.
Lo interesante de este relato es que FUE y cuando volvió y me contó lo sucedido sentí verguenza de mi futura profesión (emm no sé donde esta el diéresis en este teclado :P )... Asco, pena y desazón !!!!

El, por llamarlo de alguna manera, doctor... ni se dignó a mirarla mientras ella le relataba los síntomas que la aquejaban. Obviamente, era muchísimo más importante llenar la forma de la obra social!
Magicamente, con observar desde lejos su garganta durante unos 6 segundos, asumió tener un diagnostico sobre el cual recetó lo mismo que mi señora madre ha venido tomando a lo largo del último mes, sin resultado alguno.
A esto le sumamos, que una de las drogas que recetó con total seguridad, no la cubre la obra social ¬¬


A dónde quiero llegar con esto?


Para qué hice yo tanto kilombo mandando a mi vieja al médico si se va a encontrar con un mediocre como este que ni la escucha, ni la mira!??!!
Para qué tantos médicos se llenan la boca hablando pestes de la automedicación y de los farmacéuticos que recetan sin autoridad si al final ir a un consultorio es perder el tiempo??!!
Para qué se rompe el lomo uno estudiando durante tantos años si al final por unos mangos te dejas someter por viles empresas como las obras sociales??!!!


Se me vienen a la mente mil preguntas por el estilo... Que se yo!!! Seguramente me dirán que soy chica, que no entiendo de esas cosas, que todavía conservo ingenuos ideales de perfección.

Lo más probable es que tenga que esperar hasta llegar ahí y ver por mi misma como se maneja el asunto. Sé perfectamente que uno para opinar tiene que estar muy interiorizado sobre el tema o vivirlo en carne propia, sino es difícil entender realmente de qué se trata. Pero creo que en estos casos el profesional puede elegir... Hacer las cosas bien o hacer las cosas mal.
Creo que después de tantos años de sacrificio lo menos que podemos hacer es HACER LAS COSAS BIEN.